Los animales que habitan en las alturas de los bosques tropicales enfrentan un mundo tridimensional y lleno de desafíos. Sin embargo, sus adaptaciones los convierten en verdaderos maestros de la supervivencia. Desde la increíble agilidad del kinkajú hasta la cautelosa paciencia del hormiguero pigmeo, cada especie ha desarrollado estrategias fascinantes para prosperar en este ambiente.
Este mamífero nocturno posee una cola prensil que le permite moverse ágilmente por las ramas en busca de fruta.
El más pequeño de los osos hormigueros, especializado en cazar insectos entre el follaje alto donde rara vez es visto.
Una cazadora silenciosa, la boa arborícola se desliza entre las ramas a la espera de presas desprevenidas.